Un estilo de vida poderoso

Como madre de ocho hijos, Eve Hewett necesitaba un negocio, así como necesitaba espacio para ella misma. Había usado algunos aceites esenciales y sabía que su vecina, Laura Jacobs, estaba involucrada con doTERRA, pero no fue hasta que los necesitó para su familia que acudió a Laura en busca de ayuda y descubrió cuánto podían hacer los aceites esenciales.

Eve comenzó a usarlos frecuentemente, pero aún no tenía interés en el negocio. Ella comenta: “Fui ama de casa durante 25 años. Estaba muy ocupada y no quería empezar un negocio, pero les contaba a todos sobre los aceites. Finalmente, mi esposo dijo: 'Sabes, de todos modos, les estás contando a todos sobre los aceites esenciales, es mejor que ganes un poco de dinero' ".

Jon, el marido de Eve, había perdido su negocio de ebanistería a causa de su socio. Posteriormente, la familia estaba luchando para llegar a fin de mes. Aun así, Eve no quería que compartir aceites esenciales se tratara solo de dinero. No fue hasta que Laura Jacobs vino y le dijo a Eve que necesitaba su ayuda para llegar a Diamante Azul que el negocio de Eve realmente comenzó a crecer. Con la ayuda de Laura, programó clases, viajó a otros estados, llegó a rango Oro y no ha dejado de crecer.

Con el tiempo, Eve aprendió algunas lecciones valiosas. Después de conducir 16 horas a una clase en Arizona a la que no se presentó nadie de su equipo, aprendió la importancia de preparar un anfitrión o una anfitriona. “Necesitas tener buenas conversaciones sobre lo que significa ser anfitrión de una clase. Debes enseñarles cómo invitar y no solo publicar en Facebook. Necesitas enseñarles cómo dar muestras, cómo planificar una clase. Cuando están sucediendo muchas cosas, es fácil no planificar eventos futuros, pero debes estar atento a las próximas dos semanas y planificarlas ".

Eve sabe que lo más importante que puede hacer la gente es compartir los aceites esenciales. “Es simplemente hablar y servir a la gente más que cualquier otra cosa. Escucha lo que dice la gente cuando les preguntas cómo les va. Todos tienen algo en lo que puedes ayudarles ". Lo haces para ayudar a los demás y hacer que los aceites entren en sus vidas, incluso si nunca construyen un negocio. Eve considera que su trabajo está hecho no solo cuando consigue que alguien tenga una experiencia con los aceites esenciales, sino cuando todos los productos se han convertido en parte de su estilo de vida. “Una de mis cosas favoritas es el programa de Recompensas por Lealtad y no porque fortalezca mi negocio, aunque eso es bueno, sino también porque cuando las personas hacen pedidos mensuales comienzan a probar diferentes productos e incorporan toda la línea de productos en sus vidas. Cuando comienzan a recurrir a doTERRA por cualquier cosa que necesitan, es cuando cambian poderosamente sus vidas ".

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