Es importante controlar el estrés, porque no solo es agotador emocionalmente, sino que también es malo para la salud. Cuando estás bajo estrés, los niveles de una hormona llamada cortisol comienzan a aumentar en tu sangre. Con el tiempo, el estrés crónico que resulta en niveles de cortisol más altos de lo normal puede causar estragos en tu metabolismo, puede estimular el aumento de peso (particularmente alrededor de la cintura) y puede causar una inflamación peligrosa dentro de tu cuerpo. Puede afectar tus niveles de azúcar en la sangre, tu presión arterial y corazón, e incluso tu memoria.
Tres estrategias simples para contrarrestar el estrés:
- Adopta un nuevo enfoque. Gran parte del estrés de la vida proviene de cómo vemos las diversas situaciones que encontramos. Por ejemplo, dos personas pueden asumir la misma tarea, pero solo una persona puede encontrarla estresante. Algo de esto tiene que ver con la personalidad, pero también tiene que ver con la narrativa interior: cómo enmarcas las cosas en tu mente. Intenta cambiar tu perspectiva y, a menudo, puedes reducir la cantidad de factores estresantes en tu vida.
- Quema la tensión. La actividad física puede reducir los niveles de cortisol y ayudarte a estar más equilibrado. Pero para muchas personas, ceñirse a un programa de ejercicio diario es en sí mismo estresante, porque eligen actividades que no disfrutan. En su lugar, elije hacer algo que te guste: jardinería, paseos por la naturaleza o yoga, que pueden reducir los efectos dañinos del estrés. Esperar con ansias la actividad puede mantenerte motivado y ayudar a relajarte y recargar energías.
- Organízate. La desorganización y el desorden pueden provocar estrés y son innecesarios. Tomarse el tiempo para crear algunos sistemas, como lugar fijo para tus llaves, puede ayudar a reducir estas molestias diarias. Además, planea con anticipación otras estrategias que puedan ayudarte a manejar tu estrés. Aparta tiempo para hacer ejercicio, para planificar comidas saludables y establece un horario regular para asegurarte de dormir lo suficiente. Además, si sabes que enfrentarás un período estresante (el aniversario de la muerte de un ser querido, una cirugía próxima, un desafío financiero), piensa de antemano cómo lo vas a manejar. Tener un plan puede ayudar a reducir tu nivel de estrés y evitar que afecte tu salud.