Origen: un derivado latino que significa "Don de la Tierra."
Para muchas personas, tener tiempo para relajarse puede parecer un lujo. A medida que haces todo lo posible para cumplir con las tareas de tu apretada agenda, la idea de relajarse puede tener una connotación negativa e incluso parecer una interrupción que debe evitarse. Sin embargo, las investigaciones han demostrado que aprender a relajar la mente y el cuerpo es fundamental para afrontar los diversos desafíos que puede traer la vida. Afortunadamente, encontrar formas de relajarse no tiene por qué ser complicado ni llevar mucho tiempo. Si dispones de las herramientas adecuadas, podrás afrontar el estrés de forma eficaz y permanecer relajado durante todo el día.
Los científicos han explorado durante mucho tiempo la relación entre el acto de respirar y las emociones. Un estudio publicado en la revista Applied Psychophysiology and Biofeedback mostró que la respiración afecta los procesos autónomos o involuntarios en el sistema nervioso central. Los investigadores explicaron que la respiración podría ser el vínculo para equilibrar los procesos involuntarios en la mente sobre los que no tienes control directo.
Para practicar la respiración concentrada, intente alargar la exhalación. Exhale durante seis segundos para expulsar el exceso de aire de sus pulmones. Luego, deje que sus pulmones inhalen durante cuatro segundos. Puede repetir este ciclo hasta 10 veces.
Probablemente pases mucho tiempo en tu propia cabeza. Los investigadores han demostrado que lo que ellos llaman "escritura expresiva" tiene un impacto positivo para cualquier persona que experimente estrés (la mayoría de las personas). Poner tus pensamientos en un papel puede ser una forma rápida de comunicarte contigo mismo y aclarar tu mente. Llevar un diario puede llevar tan solo diez minutos al día y, gracias a la tecnología moderna, es más conveniente que nunca. Una variedad de aplicaciones de diario te permiten realizar entradas directamente en tu teléfono. También te dan la opción de activar recordatorios de notificaciones para que no te olvides.
Cuando los desafíos de la vida parecen abrumadores, una caminata corta puede marcar la diferencia. Al igual que otras formas de ejercicio, caminar produce endorfinas que combaten el estrés y te ayudan a relajarte. Caminar también puede ser una actividad meditativa. Cuando te desconectas y camina por el vecindario, notando cosas como el cielo y los ruidos a tu alrededor, tus sentidos te llevarán de regreso al momento presente.
Como resultado de su investigación sobre la conexión entre el cuerpo y la mente, el médico estadounidense Edmund Jacobson introdujo el concepto de relajación muscular progresiva en la década de 1930 como una forma de lidiar con la ansiedad. El proceso implica tensar y relajar varios grupos de músculos sucesivamente mientras se controla la respiración. Si bien esta técnica calma la mente, puede ser especialmente útil para quienes buscan una forma de relajar el cuerpo.
Si te resulta difícil relajarte, intente dedicar tiempo a algo que te guste hacer. Dedicar tiempo a las cosas que te encantan puede permitirte alejarte de los desafíos con los que te enfrentas y restablecer el cuerpo y la mente.
Si bien algunas de estas prácticas son excelentes para un uso inmediato o único, los beneficios se vuelven más evidentes a medida que las practicas de manera constante. Al igual que con cualquier cambio de comportamiento, es más eficaz concentrarte en un cambio a la vez, en lugar de intentar cambiar muchas cosas a la vez. Elija una de estas técnicas para incorporarla a su rutina habitual hasta que se convierta en un hábito. A medida que desarrolle estas herramientas, se volverá más consciente de su estado mental y emocional y sabrá exactamente qué hacer cuando necesite relajarse por un momento.