Si estás cansado de pasar los sábados limpiando, solo para descubrir el lunes que tu casa parece igual, aquí tienes algunos consejos:
Haz tu cama Como la superficie más visible del dormitorio, una cama sin hacer hace que todo el cuarto se vea desordenado.
Guarda todos los platos lavados de la noche anterior todas las mañanas Guardar los platos de la noche anterior hace que sea más fácil mantener la casa limpia porque los platos sucios no tendrán que reposar en el lavadero o en las encimeras. Esto solo te tomara 5 minutos. Hazlo mientras preparas el café o mientras esperas a que los niños se preparen para ir a la escuela.
Limpia cada vez que cocinas Las encimeras sucias atraen plagas domésticas y hacen que su cocina luzca horrible. Esta tarea no implica mover todo. Guarda cualquier alimento, luego rocía y limpia alrededor del resto.
Lava una carga de ropa todos los días Un hábito de lavado diario cambia la vida. Pon una carga antes de irte al trabajo. Transfiere la ropa húmeda a la secadora después de la cena, luego dóblala durante las pausas comerciales en la televisión.
Usa felpudos Cuanta menos tierra se arrastre en el interior, menos a menudo necesitarás limpiar tu piso. Mantenlo fuera de tu casa con felpudos en cada puerta exterior. Aspira o sacúdelos afuera cada 2 o 3 días.
Ten una rutina de cierre de la cocina Ordenar la cocina al final del día conduce a un comienzo más agradable al día siguiente. Guarda tu cafetera, guarda la comida y el desorden en las encimeras y saca la basura de la cocina. Hacer estas cosas también ayuda a prevenir las plagas domésticas.
Mantén un horario de limpieza de la casa Imagínate lo difícil que es limpiar una taza de café derramada en el piso de la cocina si la has dejado reposar allí toda la noche. Limpiarlo de inmediato, por otro lado, demora solo unos segundos. Lo mismo ocurre con el resto de tu casa. Ya sea que decidas limpiarlo todo un día a la semana o una habitación al día, seguir un horario constante es uno de los secretos más importantes para mantener una casa limpia. Por lo tanto, no esperes a que tu hogar se vea todo desordenado para decidir hacer las tareas del hogar.