Origen: un derivado latino que significa "Don de la Tierra."
Los aceites cítricos son fantásticos para difundir; refrescan magistralmente cualquier espacio mientras ayudan a calmar tu sistema nervioso. Sus aromas fragantes son alegres y al mismo tiempo ayudan a levantar el ánimo. Son excelentes para difundir en las noches, entretener a tus invitados, meditar en las mañanas y ayudar a relajarte antes de acostarte.